viernes, 10 de enero de 2020

Eugenesia Nazi 4T en Mexico



https://m.excelsior.com.mx/opinion/francisco-garfias/un-presidente-desconectado-de-la-realidad-y-un-valiente-doctor/1357200


Un Presidente “desconectado de la realidad” y un valiente doctor
Francisco Garfias
01/09/2020
Al doctor Carlos Leal, especialista del Instituto Nacional de Pediatría, no le importa que lo corran por la valiente denuncia que se apresta a hacer: la falta de los insumos en los hospitales públicos para niños con cáncer y sus posibles consecuencias.Leal no es un conservador aliado con las...
Al doctor Carlos Leal, especialista del Instituto Nacional de Pediatría, no le importa que lo corran por la valiente denuncia que se apresta a hacer: la falta de los insumos en los hospitales públicos para niños con cáncer y sus posibles consecuencias.
Leal no es un conservador aliado con las farmacéuticas a las que se les quitó el negocio de las medicinas. Tampoco un conspirador contra la 4T, ni un aliado de Felipe Calderón.
Es un indignado oncólogo pediatra, con más de 30 años de experiencia, que se atreve a exponer públicamente las graves carencias que le impiden realizar su actividad profesional adecuadamente: salvar vidas de niños gravemente enfermos.
En medio del caos en que está convertida la transición del Seguro Popular al Instituto de la Salud para el Bienestar (Insabi), con el consiguiente impacto sobre la población sin seguro social, el doctor  salió del búnker de radioterapia del Instituto para hacer esa denuncia.
Nos dice que desde hace 15 días falta en el INP una droga básica, llamada ifosfamida, para tratamiento de “tumores sólidos” en los niños.
“La estamos reemplazando con un medicamento que se llama ciclofosfamida, que es como primo, pero que no es tan bueno para penetrar algunos sitios como el cerebro”, precisa.
Leal es encargado de hospitalización en el Instituto, por ahora. Tiene 14 días firmando recetas con el medicamento substituto “porque no hay ifosfamida”.
No solicita el anonimato. “Puede poner mi nombre. Estoy en rango de jubilación. Ya no le temo a nada”, subraya.
Enseguida habla de las posibles consecuencias en los niños con cáncer por la utilización del medicamento substituto:
“Al modificarse los protocolos se modifican resultados. Si yo le pongo una tuerca del tres y medio en vez de una tuerca del tres, el resultado se verá afectado. Estamos haciendo esto en niños con cáncer de todo el país”, protesta.

 * El doctor sostiene que el Instituto Nacional de Pediatría no es el único con problemas de insumos. Nos da una lista de hospitales, donde trabajan sus colegas y alumnos que padecen la misma situación:
El Hospital 20 de Noviembre no tiene platino ni ifosfamida.
El Hospital Central Militar tiene desabasto de quimioterapia en niños.
El Hospital Infantil de Tlaxcala no tiene ningún insumo.
El Hospital Infantil de México tiene déficit importante del medicamento.
El Hospital de Pemex no tiene fármacos desde hace algunas semanas.
El Centro Médico de Occidente y el Centro Médico Nacional andan en las mismas.
“Nadie dice nada porque les da miedo que los corran, pero lejos de ser un problema partidista, tenemos un problema de salud grave en este país”, subraya.

 * Los protocolos de quimioterapia están diseñados para aplicarse como recetas de cocina; día uno, droga A; día ocho, droga B, día 15, droga C. “Cuando se hace esto, el resultado es lo que dice el protocolo internacional”, señala.
Y agrega: “Cuando yo a una mamá le digo que se cura 80 por ciento de los casos es porque estoy siguiendo las reglas del protocolo que estoy utilizando. Al estar cubriendo estos déficits con drogas distintas, a tiempos distintos, estamos modificando los resultados establecidos para un protocolo”.

 * Por cierto que el diputado Juan Carlos Romero Hicks nos dijo ayer que el PAN lanzó un reto al desconfiado López Obrador para ir conjuntamente —sin aviso previo— a hospitales públicos, seleccionados en un sorteo.
La idea es visitar conjuntamente esos hospitales, acompañados de especialistas de confianza, “y vayamos personalmente a verificar, sin avanzadas”.
Y si no quiere que lo acompañen los panistas “que el Presidente vaya, entreviste a los médicos, al personal de salud y a los enfermos, a fin de que se dé cuenta de lo que realmente ocurre en Neurología, Nutrición, Cardiología, Pediatría, Siquiatría, que son institutos que le han dado un prestigio a la medicina mexicana”, dijo.
Sintetizó: “tenemos un Presidente que está desconectado de la realidad”.




Ni Seguro ni Insabi



JAQUE MATE / Sergio Sarmiento
en REFORMA
10 Ene. 2020

"Si por seguro entendemos la protección financiera que hace que la gente no se arruine económicamente por pagar por su salud, por supuesto que es seguro y es popular".

Julio Frenk


Una vez más el presidente López Obrador tomó una decisión por razones políticas sin preocuparse por las consecuencias. Con el argumento de que el Seguro Popular no era ni seguro ni popular, se apresuró a reemplazarlo por un Instituto de Salud para el Bienestar, el Insabi, que entró en funciones el 1o. de enero en medio de una enorme confusión sobre su financiamiento y reglas.

El Seguro Popular, creado en 2003, no era perfecto, por supuesto. Operó siempre con recursos insuficientes. Sin embargo, fue uno de los programas sociales mejor evaluados y dio servicios de salud a más de 50 millones de mexicanos que no tenían otra opción. Julio Frenk, exsecretario de Salud y actual presidente de la Universidad de Miami, señaló en 2018 que "120 estudios sugieren que el Seguro Popular ha disminuido drásticamente el número de mexicanos que enfrentan gastos catastróficos y [reducido] la mortalidad infantil".

López Obrador, sin embargo, siempre ha despreciado las voces de los especialistas: "El llamado Seguro Popular -dijo en diciembre de 2018- es evidente que no ha funcionado, que no es seguro ni es popular, y va a ser sustituido por un sistema de salud que garantice atención médica de calidad y medicamentos gratuitos, pero esta sustitución se va a ir dando poco a poco". También ha afirmado: "México va a tener un sistema de salud como el que tienen en Dinamarca y en Canadá".

Hoy ya no tenemos Seguro Popular, pero el Insabi está empezando a operar en medio de la incertidumbre. Los políticos aplaudidores no ven ningún problema. "La modalidad de desaparición del Seguro Popular es muy benéfico para la gente", declaró ayer, con extraña sintaxis, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, "porque el recurso que antes estaba limitado para ciertas cosas ahora va a estar abierto para la contratación de médicos de mejor manera, para el abastecimiento de los medicamentos de mejor manera". No todos los pacientes, sin embargo, están de acuerdo.

El Insabi promete dar servicios médicos gratuitos a toda la población que simplemente se identifique como mexicana, sin cobrar los reducidos o nulos pagos de los asegurados del Seguro Popular. Todos los mexicanos podrán recibir tratamientos de primero y segundo nivel en los centros de salud en que operaba el Seguro Popular. El nuevo sistema, sin embargo, descarta cubrir los servicios de tercer nivel o alta especialidad. Por eso ha habido tantas quejas de padres de niños con cáncer y de pacientes con sida.

El sistema de salud no está recibiendo más dinero por lo que los problemas del Seguro Popular, lejos de resolverse, seguirán empeorando con el Insabi. El dinero no lo es todo, pero se necesitan recursos para proporcionar servicios. México tiene un gasto público y privado en salud de 1,138 dólares anuales por persona, Canadá 4,974 y Dinamarca 5,299 (OCDE). En México, sin embargo, los recursos públicos no solo no están subiendo, sino que están bajando. El presupuesto de la Secretaría de Salud en 2019 fue de 128,700 millones de pesos, pero en 2020 bajó a 128,600 millones. En 2013 el gobierno dedicaba al sector salud 2.8 por ciento del PIB, pero en 2019 solo 2.4 por ciento. No es esta la forma de construir un sistema de salud como el de Dinamarca o el de Canadá.



·GERTZ Y NIETO

El fiscal general Alejandro Gertz Manero se quejó de quienes revelan información de las investigaciones previas violando la presunción de inocencia. El Presidente respondió ayer que se reunirá con el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera para discutir el tema, pero inquietantemente añadió: "Santiago [Nieto] no hace nada sin consultar al Presidente".



@SergioSarmiento





 

Licenciado en filosofía por la Universidad York de Toronto. Director editorial de Encyclopaedia Britannica en Latinoamérica y España de 1978 a 1994. Dirigió la Enciclopedia Hispánica. Colabora con El Norte desde 1989 y Reforma desde 1994. Fue vicepresidente de noticias de TV Azteca. Conduce La Entrevista con Sarmiento y otros programas de radio y televisión. Caballero de la orden de las letras y las artes de Francia.

Cada cuatro horas muere un niño por cáncer en México

Diagnóstico temprano y tratamiento oportuno hacen la diferencia entre la vida o la muerte de los afectados


En México, cada cuatro horas muere un niño por cáncer y se estima que anualmente se registran más de cinco mil nuevos casos. El cáncer es la segunda causa de mortalidad infantil en el país, según cifras de la Secretaría de Salud

Cada 15 de febrero se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil, con el fin de hacer un llamado a la población y en especial a los padres de familia, así como al personal de salud para estar atentos ante cualquier posible manifestación de tumores malignos en los menores de edad.
Desde el año 2001 se instituyó esta efeméride, con el objetivo de generar alianzas estratégicas y conciencia social sobre este mal, y en el mundo, cada tres minutos es diagnosticado un menor con cáncer.
El diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno pueden hacer la diferencia entre la vida o la muerte de la persona, ya que hasta 70 por ciento de los casos son curables si se atienden a tiempo.
En México sólo existen 135 oncólogos pediatras para los más de cinco mil casos de cáncer infantil que se registran anualmente, y cada año fallecen en promedio 2 mil 300 menores.
El país cuenta con el Programa Nacional de Cáncer en la Infancia y Adolescencia, cuyos principales objetivos son disminuir la mortalidad e incrementar la sobrevida y calidad de vida de los pequeños.
Los tres tipos de cáncer infantil más comunes son: leucemia con 31 por ciento de los casos, con una tasa de supervivencia de 80 por ciento; tumores cerebrales, con 16 por ciento de la carga, y una tasa de supervivencia de 67 por ciento; así como linfoma con 15 por ciento de los casos y una supervivencia de 91 por ciento en Linfoma de Hodkin, y 72 por ciento en Linfoma No Hodkin.
Los principales síntomas de cáncer infantil son: pérdida de apetito, pérdida de peso, palidez, cansancio, sudoración nocturna o excesiva, dolor de cabeza persistente, dolor de huesos y articulaciones.
Además, puntos rojos o moretones sin alguna causa aparente, bolitas en cuello, axilas o ingles y reflejo blanco en la pupila, señaló Biogentec, la división de alta especialidad de Grupo Neolpharma, especialista en tratamientos oncológicos.
Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que el cáncer infantil es una de las principales causas de mortalidad entre niños y adolescentes en el mundo, donde cada año se diagnostican 300 mil nuevos casos de este tipo.
Con la idea de concientizar sobre la importancia de un diagnóstico temprano y un tratamiento inmediato, en 2001 se instituyó en Luxemburgo el 15 de febrero como Día Internacional Contra el Cáncer Infantil.
La conmemoración creada por la Organización Internacional de Cáncer Infantil, una red de 177 organizaciones nacionales de padres de niños con cáncer en 90 países, tiene la premisa de que todo menor que la padezca merece la mejor atención médica y sicológica sin importar país, raza, estatus económico o clase social.
Los tipos más comunes de cáncer en niños y adolescentes son: la leucemia (linfobástica aguda, mieloide o granulocítica aguda y mieloide crónica con 30 por ciento), los tumores del sistema nervioso central (que se clasifican y denominan por el tipo de tejido en el cual se desarrollan), y los linfomas (de Hodgkin y no Hodgkin).
Además de hay varios tipos tumorales que se dan casi exclusivamente en los niños, como los neuroblastomas, los nefroblastomas o tumor de Wilms, los meduloblastomas y los retinoblastomas.
Se tiene la creencia de que la mayoría de los cánceres en los niños surgen como resultado de mutaciones en sus genes como sucede con los adultos.